Dolor Agudo: Normalmente generado por algún trauma o causa identificable (cirugía, lesión). Suele ser intenso y de corta duración. Aunque inicialmente se maneja con fármacos y tratamientos inmediatos, si no cede adecuadamente o hay riesgo de cronificación, la valoración por un algólogo es importante.

Dolor Crónico: Es aquel dolor que persiste por más de 3 a 6 meses, o que dura más allá del tiempo esperado de curación. No necesariamente es tan severo como el agudo, pero su constancia afecta la calidad de vida, el ánimo y la funcionalidad. Este es el campo principal de acción del algólogo, quien buscará la causa y ofrecerá tratamientos específicos que van más allá de los analgésicos comunes.

Si tu dolor es persistente, interfiere con tus actividades diarias, no responde a tratamientos convencionales o no tienes un diagnóstico claro de su causa, una consulta con un algólogo en CDMX como la Dra. Díaz Falfán es el paso adecuado.